Murad V: El Sultán Francmasón del Imperio Otomano

السلطان مراد الخامس

El sultán Murad V es considerado una de las figuras más fascinantes y, al mismo tiempo, trágicas de la historia otomana. Se distingue de todos los demás soberanos por una particularidad única: fue el único sultán que se convirtió en miembro de una logia masónica.

Sin embargo, su reinado fue efímero. Tras la destitución y la misteriosa muerte de su tío, el sultán Abdülaziz, Murad V ascendió al poder, pero poco después sufrió un colapso nervioso severo que precipitó su pronta abdicación.

Sultán Murad V.

La ascendencia y familia del sultán Murad V

El sultán Murad V pertenecía a la dinastía otomana, cuyo linaje se remonta hasta Ertuğrul Gazi. Su línea directa de sucesión es un recorrido por los anales de la historia imperial:

Es el sultán Murad V, hijo de Abdülmecid I, hijo de Sultán Mahmud II, hijo de Abdülhamid I, hijo de Ahmed III, hijo de Mehmed IV, hijo de Ibrahim I, hijo de Ahmed I, hijo de Mehmed III, hijo de Murad III, hijo de Selim II, hijo de Süleyman el Magnífico, hijo de Selim I, hijo de Bayezid II, hijo de Mehmed el Conquistador (Fatih), hijo de Murad II, hijo de Mehmed I, hijo de Bayezid I, hijo de Murad I, hijo de Orhan Gazi, hijo de Osman Gazi, hijo de Ertuğrul Gazi.

Primeros años de vida de Murad V

Murad V nació en el Palacio de Çırağan y recibió una educación de excelencia. Además de estudiar el Sagrado Corán y los Hadices, aprendió francés y llegó a dominar la ejecución del piano.

El sultán también profundizó en la literatura francesa y la retórica turca, mostrando una fuerte inclinación hacia la poesía y la música. Su interés por la cultura occidental era muy marcado, algo que lo diferenciaba notablemente de muchos de sus predecesores.

La arquitectura y el arte también cautivaron al joven príncipe. Invirtió sumas considerables en la construcción y renovación de su propiedad en Kurbağalıdere (Kadıköy), donde pasaba gran parte de su tiempo. Se dice que el príncipe Murad poseía un carácter reflexivo, dedicando horas a la introspección mental, aunque con tendencia ocasional a la melancolía.

Un evento crucial fue su participación en el viaje por Europa de su tío, el sultán Abdülaziz, en 1867. Durante esta travesía, el Şehzade (príncipe) Murad se ganó la admiración de la realeza europea, incluyendo a Napoleón III y la reina Victoria, gracias a sus ideas liberales y su apertura a la occidentalización. Además, entabló una estrecha amistad con el entonces Príncipe de Gales y futuro rey Eduardo VII.

Fue en este periodo cuando el príncipe Murad estableció vínculos con los Jóvenes Otomanos y se unió a la francmasonería, un hecho sin precedentes para un miembro de la casa real. Se convirtió en miembro de la logia Proodos (Progreso) y más tarde propuso fundar una logia propia en lengua turca llamada «Envar ı Şarkiye» (Luces del Oriente), donde los rituales se realizarían en turco, aunque este plan nunca se concretó.

Su tío, el sultán Abdülaziz, observó estos movimientos con desconfianza, endureciendo el control sobre Murad y limitando su libertad de movimiento. A menudo, el príncipe solo podía abandonar el palacio en carruajes cerrados y requería permiso para cualquier salida.

A pesar de este aislamiento, Murad se preparó para el futuro y encargó en secreto a un abogado francés el borrador de una constitución que planeaba implementar al ascender al poder. Aunque Abdülaziz consideró cambiar las leyes de sucesión para saltarse a Murad, fue derrocado antes de poder actuar.

El breve reinado del sultán Murad V

Murad V ascendió al trono el 30 de mayo de 1876, después de que estadistas reformistas depusieran a su tío Abdülaziz.

Sin embargo, las circunstancias de su entronización fueron traumáticas. Pocos días después de asumir el mando, el depuesto Abdülaziz fue hallado muerto. Aunque oficialmente se declaró un suicidio, Murad temía ser acusado de ordenar un asesinato. Este impacto emocional le provocó un grave colapso nervioso. Los síntomas fueron tan severos que, por momentos, no lograba reconocer a sus propios ministros.

La situación se volvió crítica: la ceremonia tradicional de la ceñidura de la espada (el equivalente otomano a una coronación) y la acreditación de embajadores extranjeros tuvieron que posponerse. Un psiquiatra austríaco, el Dr. Leidesdorf, examinó al sultán pero no pudo ofrecer una cura rápida, ya que Murad estaba atormentado por sentimientos de culpa y paranoia.

Ante la incapacidad del sultán para gobernar, los ministros recurrieron a su hermano, el príncipe Abdülhamid. Tras una fatwa del Jeque al Islam (Şeyhülislam) que confirmaba que un gobernante con facultades mentales perturbadas no podía ejercer el poder, Murad V fue depuesto el 31 de agosto de 1876.

Su reinado duró solo 93 días, siendo el más corto en la historia de los sultanes otomanos. Su hermano ascendió al trono como Abdülhamid II.

Sultán Murad V., el Imperio Otomano

Vida después de la abdicación

Tras su destitución, Murad V fue puesto bajo arresto domiciliario con su familia en el Palacio de Çırağan. Curiosamente, su estado mental mejoró notablemente tras unos nueve meses de tranquilidad.

Aun así, permaneció como prisionero. Sus seguidores, incluyendo al periodista Ali Suavi, intentaron liberarlo en varias ocasiones para devolverlo al trono (destacando el llamado incidente de Çırağan). Todos los intentos fracasaron y solo sirvieron para que Abdülhamid II reforzara las medidas de seguridad y el aislamiento de su hermano. Murad pasó un total de 28 años en cautiverio en este majestuoso palacio frente al Bósforo, una zona donde hoy día se encuentran los mejores lugares para alquilar un yate en Estambul.

Muerte y legado

El sultán Murad V, quien sufrió de diabetes en sus últimos años, falleció el 29 de agosto de 1904 en el Palacio de Çırağan. Su entierro se llevó a cabo sin pompa estatal ni anuncio oficial para evitar la atención del público.

Su cuerpo fue lavado ritualmente en el Palacio de Topkapi y trasladado en una procesión silenciosa a la Mezquita Hidayet en Bahçekapı. Su última morada se encuentra en el mausoleo de la Mezquita Nueva (Yeni Cami) en Estambul, junto a su madre Şevkefza Sultan.

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¿Fue realmente el sultán Murad V un francmasón?

Sí, Murad V se unió a la francmasonería. Fue miembro de la logia Proodos y tenía planes de fundar una logia en lengua turca llamada Envar-ı Şarkiye.

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